Periodistas nicaragüenses denuncian ante la CIDH que Estado continúa violando libertades de expresión y prensa
Washington D.C., 25 de
septiembre. Tres directores de medios de comunicación
de Nicaragua denunciaron hoy a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos
(CIDH) que el Estado nicaragüense no ha cumplido las medidas cautelares
otorgadas por dicha Comisión a ellos, sus familiares y equipos, en cambio, ha escalado
la persecución, amenazas y represalias por la labor que realizan.
Sergio León, director de
la Radio La Costeñísima de Bluefields; Aníbal Toruño, director de Radio
Darío de León, y Carlos Fernando Chamorro, director del medio digital Confidencial
y la revista televisiva Esta Semana, expusieron su situación durante la
audiencia “Cumplimiento de medidas cautelares de protección en favor de
periodistas independientes”, realizada en el marco del 173 periodo de
audiencias de la CIDH.
En la audiencia además
participó Ana Bolaños, en representación del Instituto sobre Raza, Igualdad y
Derechos Humanos (Raza e Igualdad), quien lamentó la falta de comparecencia del
Estado a la audiencia, lo que demuestra la ausencia de voluntad para rendir
cuentas frente a instancias internacionales. Sobre el mismo tema, el Comisionado
Joel Hernández, Vicepresidente de la CIDH, consideró que esta ausencia era una
oportunidad perdida y un incumplimiento de sus obligaciones ante la CIDH.
Hoy día, en Nicaragua aún
persiste la censura, los ataques y la represión para el periodismo
independiente, coincidieron los ponentes: Confidencial y 100%
Noticias continúan cerrados, los periódicos se enfrentan al bloqueo del
papel, y según la Fundación Violeta Barrios de Chamorro, un total de 1,318
casos de agresiones y ataques contra periodistas independientes son
contabilizados hasta el mes de agosto.
Situación de La Costeñísima
Sergio León explicó que la Radio La Costeñísima tiene cobertura en todo el Caribe Sur de Nicaragua, y que dirigir un medio independiente ha tenido como consecuencia la intimidación, amenazas y asedio constante. Por esta razón, León y su familia recibieron medidas cautelares el 15 de junio de este año.
“Las medidas cautelares están orientadas a proteger mi vida y mi seguridad y la de mi familia, sin embargo, no han sido cumplidas ya que la policía y civiles armados que actúan como paraestatales, continúan asediándome y amenazándome, buscando callar mi voz y las voces que se expresan en Radio La Costeñísima”, afirmó León. Hasta el día de hoy, el Estado no ha llevado a cabo ninguna acción para proteger a León ni ha investigado las amenazas recibidas.
Además, denunció que las estructuras partidarias del FSLN prohíben a la población escuchar la radio, que los operadores políticos del régimen han convencido al segundo periodista que componía su equipo, que renunciara sacando por unos días del aire al noticiero Tras la Noticia, que se han registrado ataques informáticos contra la página web de la radio y que grupos de la Juventud Sandinista han marcado las paredes de la radio y las del callejón que conduce a su vivienda con amenazas.
Situación de Radio Darío
Aníbal Toruño, director
de Radio Darío, expuso que el 20 de abril de 2018 un grupo de agentes
paraestatales armados prendieron fuego a la radio de su propiedad, escapando de
morir 11 personas mientras la radio se encontraba al aire. Ante tales hechos y
otros actos de hostigamiento, Toruño, su familia y otros 9 colaboradores
recibieron medidas cautelares en julio del año pasado.
No obstante, Toruño tampoco ha recibido protección por parte del Estado, más bien, debió exiliarse a finales de agosto de 2018 y solo logró retornar en agosto de este año. “En mi retorno a Nicaragua me encontré con un régimen que continúa persiguiendo a medios y periodistas independientes”, denunció, y posteriormente narró cómo el 7 de septiembre de este año la radio sufrió nuevos ataques, cómo rodearon su casa y pintaron amenazas en las paredes, y el ataque que sufrió una caravana de la que hacía parte.
“Radio Darío sigue al aire y luchando por la libertad
expresión, pero hay evidencias claras del régimen de silenciar la radio y la
exposición de sus trabajadores a la inobservancia del deber de cumplir las
medidas cautelares y todo lo que se deriva de su aplicación es imperativo”,
añadió Toruño.
Situación de Confidencial y Esta Semana
Carlos Fernando Chamorro, director de Confidencial y Esta Semana expuso que
a partir del 13 de diciembre de 2018, la Policía tomó por asalto y saqueó las
instalaciones de ambos medios, para posteriormente el 14 de diciembre ocupar
permanentemente el inmueble. Ante dichos hechos, a finales de diciembre la CIDH
otorgó medidas cautelares a Chamorro, su familia y trece miembros de su equipo.
Chamorro también debió exiliarse en enero de este año, y posteriormente lo hicieron otros ocho miembros de su equipo. A la fecha, las oficinas de los medios de comunicación siguen ocupadas y a pesar de varios recursos legales y denuncias, el sistema judicial nicaragüense no ha actuado respecto al caso y los plazos para fallar se han vencido.
“A pesar de la censura televisiva y la intimidación oficial, y las
limitaciones que para la libertad de expresión representan los abusos aquí
narrados, Confidencial, Niú, Esta Semana y Esta Noche, se
mantienen informando, desafiando la persecución, desde Nicaragua y desde el exilio,
a través de plataformas digitales y redes sociales”, destacó Chamorro.
Peticiones
Los directores de medios de comunicación nicaragüenses pidieron a la CIDH
que solicite medidas provisionales a la Corte Interamericana de Derechos
Humanos para quienes ya habían recibido medidas cautelares y que el Estado no
ha cumplido, y que además amplíe medidas cautelares para que beneficien a otros
periodistas de Confidencial y Esta Semana que enfrentan graves
riesgos.
Además, solicitaron a la CIDH que demande al Estado de Nicaragua el cese
del acoso, intimidación, ataques físicos y periodistas y sus familiares, y la
censura, así como la inmediata devolución de los bienes confiscados
ilegalmente. Demandaron al Estado nicaragüense que garantice la integridad
física y los derechos de los periodistas que retornan del exilio, para que
puedan ejercer su profesión en libertad.
Por su parte, los Comisionados de la CIDH Antonia Urrejola, Relatora para
Nicaragua; Margarette May Macaulay, Relatora sobre los Derechos de las Personas
Afrodescendientes y Joel Hernández, Vicepresidente de la CIDH, reiteraron su
compromiso para continuar monitoreando la situación, y se comprometieron a
estudiar las solicitudes realizadas por los peticionarios. Edison Lanza,
Relator Especial para la Libertad de Expresión, sostuvo que en Nicaragua existe
un plan sistemático del gobierno para cerrar todos los espacios al periodismo
independiente y felicitó a los periodistas por seguir haciendo periodismo en un
entorno tan hostil.