Comunicado Público: Continua crisis en Nicaragua

Comunicado Público: Continua crisis en Nicaragua

Washington, D.C, noviembre 23 de 2018 –  El Instituto Internacional sobre Raza, Igualdad y Derechos Humanos expresa su enérgica condena y rechazo a la resolución emitida el día de hoy 23 de noviembre por la Policía de Nicaragua, en relación a la marcha convocada en conmemoración del Día Internacional para la eliminación de la Violencia hacia las Mujeres por la Unidad Nacional Azul y Blanco, UNAB,   la cual había sido anunciada para el próximo domingo 25 de noviembre en la ciudad de Managua, en protesta por la violación de los derechos fundamentales de los nicaragüenses vulnerados desde hace siete meses por el régimen Ortega Murillo.

En la resolución, comunicada por el Jefe de la Dirección de Seguridad Pública de la Policía Nacional de Nicaragua, Comisionado General Luis Fernando Barrantes, se niega la autorización y la   Policía Nacional, en un claro acto de abuso de poder cataloga dicha iniciativa como un “acto vandálico” y “terrorista” con “fines golpistas” que pretende “afectar a las familias nicaragüenses y la tranquilidad del país”. Adicionalmente, se expresa en actitud amenazante:  “…que la Policía Nacional no autoriza ni autorizará movilizaciones públicas a personas, organizaciones o movimientos  que participaron y están siendo investigados por sus acciones en el fallido intento de golpe de Estado…”.

Como institución que trabaja a favor del respeto, la garantía y la protección de los derechos humanos, repudiamos dicha comunicación policial, pues desconoce, descontextualiza y violenta una vez más el derecho de los nicaragüenses a la manifestación pacífica para denunciar los innumerables actos de asedio y la represión en la que han incurrido las autoridades nicaragüenses desde el mes de abril, intentando propiciar una falsa normalidad en el país cuando los actos de acoso e intimidación en todos los espacios públicos siguen siendo cometidos por la Policía, lo que claramente daña cualquier posibilidad de retornar a la tranquilidad para  las y los nicaragüenses a quienes la represión no ha dado tregua.

Así mismo, denunciamos la indolencia del  Estado nicaragüense que se rehúsa a aceptar  la existencia de las víctimas de esta crisis humanitaria, provenientes de la población autoconvocada, las que hoy se traducen en más de 500 manifestantes, estudiantes y activistas privados de libertad bajo condiciones que atentan contra su vida,  integridad y debido proceso, así como  los 325 asesinatos, aproximadamente, que permanecen en impunidad, y los actos de intimidación a los que son sometidos diariamente las mujeres, procesados por los hechos de abril, periodistas, defensores de derechos humanos, personas LGBTIQ y comunidad en general.

Raza e Igualdad condena también, con vehemencia, los actos de intimidación, asedio y acoso en los que ha incurrido la Policía Nacional en las últimas horas,   en diferentes puntos de la ciudad de Managua y otros departamentos, lo que demuestra que nada está normal en Nicaragua. La arbitrariedad con la que continúa actuando la Policía provoca un ambiente de miedo e inseguridad en la población. En ese sentido, exigimos la pronta liberación de los dos colaboradores de Radio Darío, Omar López y Eduardo Patricio Amaya, secuestrados en horas de la mañana del día de hoy. Amaya cuenta con medidas cautelares otorgadas por la CIDH, MC 693-18. Responsabilizamos al Estado de Nicaragua por cualquier situación que vulnere  vida, integridad y derechos humanos de ambos trabajadores de Radio Darío.

De manera urgente, hacemos un llamado a la comunidad internacional a pronunciarse frente a estos actos de grave violación a los derechos fundamentales del pueblo nicaragüense que continúa en estado de indefensión por los desmanes dictatoriales del gobierno de turno. Así mismo, hacemos un llamado a la comunidad internacional a levantar sus voces en contra de los atropellos que continúan sufriendo los nicaragüenses por un régimen que continúa mostrándose renuente a cumplir sus compromisos internacionales en materia de derechos humanos.

20 de noviembre – Día Internacional de la Memoria Trans

“Estoy convencida de que el motor de cambio es el amor. El amor que nos negaron es nuestro impulso para cambiar el mundo. Todos los golpes y el desprecio que sufrí no se comparan con el amor infinito que me rodea en estos momentos.”

Lohana Berkins 1965-2016. Activista travesti.

En el Día Internacional de la Memoria Trans el Instituto Internacional sobre Raza, Igualdad y Derechos Humanos honra la memoria de las personas trans que han perdido su vida a causa de actos de intolerancia, odio y discriminación por su identidad de género en toda la región. El 20 de noviembre es un día también de celebración de la vida de las personas trans, que a pesar de la exclusión social, las limitaciones en el acceso a sus derechos y la ausencia de políticas sociales que respondan a sus necesidades básicas, continúan luchando, defendiendo sus derechos y construyendo redes de transformación social desde lo local.

La discriminación, violencia y segregación contra las personas trans y de género diverso constituyen un aspecto estructural de las sociedades, por tal razón, a lo largo de la historia, sus derechos han estado sometidos a un círculo vicioso de violencias, degradaciones y opresiones que las han alejado de la posibilidad de gozar de las garantías de una vida digna e integra.

Alrededor del mundo las personas trans son sometidas a burlas, chantajes, asaltos físicos y sexuales y asesinatos por su identidad diversa; así como también, se les niega la posibilidad de acceder a empleos dignos, contar con atención médica acorde a sus necesidades, y ser consideradas sujetos dignos de respeto y reconocimiento en el conjunto social. Los estigmas a los que son sometidas las personas trans conllevan a la invisibilización de sus realidades y experiencias, así como al desconocimiento de los múltiples desafíos, barreras y violaciones a sus derechos humanos, es por esto, que en la mayoría de los países los datos sobre violencia contra personas trans y género-diversas no son sistemáticamente producidos por lo tanto resulta imposible estimar el número exacto de casos.

Raza e Igualdad observa con preocupación como todavía las cifras más altas de homicidios hacía personas trans siguen presentándose en países de Latino América y el Caribe bajo móviles de prejuicio y discriminación, además de lógicas machistas e ideas fundamentalistas que desconocen la diversidad, libertad y autonomía de los individuos para identificarse y auto-definirse.

No obstante estos adversos contextos de violencia, vemos a lo largo de Latinoamérica, experiencias de solidaridad y liderazgo que trascienden los márgenes de la exclusión social y logran hacer eco de los reclamos sociales de las personas trans. Han sido los y las lideresas trans quienes han logrado impactar en políticas públicas locales, han logrado construir redes de apoyo que han evidenciado las violencias que viven y sobre todo han generado respuestas creativas para el cambio social desde espacios de exclusión.

Raza e Igualdad en el marco de esta conmemoración solicita a los Estados de la región, ampliar los espacios de dialogo social con las organizaciones de personas trans, fortalecer los mecanismos de investigación sobre las violencias de las que esta población ha sido víctima para superar la impunidad y definir de manera conjunta con líderes y lideresas trans, políticas sociales de transformación que impacten verdaderamente en sus necesidades más inmediatas. Estamos convencidos de que las personas trans deben seguir siendo recordadas por sus actos transformadores y no por la violencia impune con la que son eliminadas.

Defensores de derechos humanos expondrán en Ginebra la evolución de la crisis en Nicaragua

Washington. D.C, noviembre 20, 2018 – La crisis actual de derechos humanos en Nicaragua,  que inició  desde hace siete meses producto de la represión gubernamental a las protestas ciudadanas, será expuesta en Ginebra el próximo 28 de noviembre en el marco del conversatorio “Crisis de derechos humanos en Nicaragua”con el objetivo de visibilizar sus consecuencias y permanencia, ahora con la prohibición de las manifestaciones cívicas y la judicialización de cientos de protestantes, estudiantes y activistas que han sido apresados por participar en protestas y están siendo sometidos a juicios en los que se irrespetan  las garantías del debido proceso.

En el conversatorio organizado por el Instituto Internacional sobre Raza, Igualdad y Derechos Humanos (Raza e Igualdad), participarán defensores de derechos humanos nicaragüenses, quienes desde su experiencia durante la crisis relatarán sus propias vivencias y los riesgos a los que se enfrentan ejerciendo su labor.

Especial énfasis tendrá en el conversatorio la situación de injusticia e indefensión a la que se enfrentan poblaciones tradicionalmente discriminadas como son las mujeres, pueblos indígenas, afrodescendientes y comunidad LGBTI, quienes han sido reprimidos por defender la democracia y reclamar justicia y respeto a los derechos humanos.

También se referirán a la situación  que enfrentan  cientos de presos y presas políticas, quienes han denunciado torturas y malos tratos en las cárceles y centros de detención. Según el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH), de los 602 ciudadanos apresados hasta el 14 de noviembre por participar en las protestas, 563 son hombres y 50 mujeres, de las cuales 4 son mujeres transgénero.

La imagen de la “normalidad” que intenta establecer el Gobierno nicaragüense tanto  a nivel nacional como internacional, contrasta diametralmente con la visión que proporcionarán los defensores de derechos humanos respecto a que realmente,  en Nicaragua, “nada está normal”, pues las violaciones de derechos humanos por parte de las autoridades son sistemáticas  y permanecen en la impunidad.

Nicaragua será evaluada por el Examen Periódico Universal en 2019. Dicha revisión ofrecerá a defensores y defensoras de derechos humanos, organizaciones de la sociedad civil y a la comunidad internacional una importante oportunidad para incidir en resolver de forma pacífica, la crisis que hoy agobia a los y las nicaraguenses.

El 26 de octubre conmemoramos el Día Internacional de la Conciencia Intersex

En el marco del día Internacional sobre la Conciencia Intersex, el Instituto sobre Raza, Igualdad y Derechos Humanos (Raza e Igualdad) hace un llamado a poner fin a la discriminación, exclusión, tortura, patologización, medicalización innecesaria e invisibilización que afecta a las personas intersex y a sus familias en la región. En este sentido, Raza e Igualdad recuerda que las personas intersex son aquellas cuya anatomía sexual no se ajusta físicamente a los estándares culturalmente definidos para el cuerpo “femenino” o “masculino”. Sin embargo qué quiere decir esto? Proponemos a continuación algunas preguntas y respuestas para acercarnos de mejor manera a este tema:

¿Es la intersexualidad lo mismo que el hermafroditismo?

No. Aunque en el imaginario cultural se asocie al “hermafrodismo” con la figura de la literatura griega dotada de características sexuales externas asociadas a la presencia de pene, vulva y senos, el hermafroditismo realmente hace referencia en botánica y zoología a la capacidad reproductiva de una planta o animal que incluso puede auto-fecundarse. Cuando nos referimos a personas, existe consenso en la comunidad científica en el sentido de que es más adecuado referirnos a la intersexualidad. Algunos activistas como Mauro Cabral prefieren referirse a si mismos como personas intersex, dando un valor político a esta discusión por fuera de las discusiones médico-legales.

¿Es la intersexualidad lo mismo que el transgenerismo?

No. Aunque ambos conceptos pueden llegar a encontrarse, es importante tener claro que:

  1. La intersexualidad es una característica biológica que está asociada al desarrollo genético y corporal de las personas (lo que tradicionalmente llamamos sexo) y puede ser visible externamente en el cuerpo de la persona desde el momento de su nacimiento.
  2. El transgenerismo está más asociado a la construcción que hace de si misma una persona en el transcurso de su vida y como se presenta a la sociedad (lo que llamamos identidad de género) Aunque este proceso pueda incluir intervenciones corporales para que el cuerpo esté en consonancia con la identidad de género.

¿Si la intersexualidad es biológica y connatural a la persona, por qué es necesario un día intersex?

  1. Es importante tener en cuenta que aunque a pesar de que la intersexualidad es una realidad biológica, muchas personas no conocen la existencia de este hecho y por ende la existencia de las personas intersex.
  2. Esta realidad biológica que es negada en el ámbito de la educación (no se enseña a desde temprana edad), también se refleja en el ámbito legal, ya que solo se reconocen “dos sexos biológicos” aunque la realidad, es mucho más amplia que ello, lo que trae importantes consecuencias en la vida de las personas intersex.
  3. El origen de este día se remonta a 1996 cuando activistas intersex se manifestaron ante la Reunión Anual de la Academia Americana de Pediatría en Boston, contra las mutilaciones genitales y tratamientos hormonales de las personas intersex a temprana edad sin su consentimiento informado.

¿Son las personas intersex víctimas de violaciones a los derechos humanos?

Si. Las personas intersex han sido víctimas de múltiples violencias que se han reflejado en distintos ámbitos de sus vidas:

  1. Se niega su existencia en el ámbito jurídico y médico, ya que en muchos países existen solo dos sexos legalmente reconocidos: hombre y mujer. Aunque esto está transformándose con el reconocimiento del sexo neutro.
  2. A consecuencia de lo anterior a las personas intersex se les imponen procedimientos quirúrgicos desde muy temprana edad. Les son aplicados los protocolos médicos vigentes aún que indican se practiquen intervenciones quirúrgicas innecesarias, con la intención de “normalizar” sus genitales, sin que medie el consentimiento informado de la persona. Cabe destacar que estas intervenciones acarrean consecuencias irreversibles en la vida emocional, física y sexual de las personas incluyendo esterilización y mutilación genital, sin que medicamente sean necesarias en la gran mayoría de los casos.
  3. Organismos de protección de derechos humanos como las Naciones Unidas y la Comisión Interamericana han documentado graves vulneraciones de los derechos humanos de personas intersex, sobre todo en lo relacionado con la discriminación, invisibilización, falta de información oficial y el tratamiento médico que tienden a recibir éstas desde su nacimiento, a lo largo de su vida, barreras en el acceso a sus expedientes médicos, e incluso dificultades en lo referente al reconocimiento de su personalidad jurídica en los registros públicos de identidad.
  4. Según los testimonios de diversas personas intersex, la naturaleza de las intervenciones acarrea frecuentemente que deban realizarse múltiples cirugías en distintas etapas de sus vidas, lo cual provoca dolores crónicos, posibles problemas de salud, y la necesidad de realizar procedimientos de rutina sumamente invasivos equiparables a tratos crueles inhumanos y degradantes o tortura.

Por todas estas razones Raza e Igualdad, condena la patologización y las prácticas de mutilación genital infantil que padecen algunas personas intersex, y extiende un llamado a los Estados de la región para que asuman sin más dilaciones sus obligaciones internacionales en materia de protección de derechos humanos, y reconozcan, garanticen y protejan de manera integral, sin patologización, y en consulta con las personas intersex, sus derechos humanos.

Raza e Igualdad rechaza arbitraria prohibición de autoridades nicaragüenses que negaron ingreso al país de representantes del Centro por la Justicia y el Derecho Internacional, CEJIL

El Instituto Internacional sobre Raza, Igualdad y Derechos Humanos (Raza e Igualdad) condena enérgicamente la arbitraria prohibición de ingreso a Nicaragua del equipo de trabajo del Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL), quienes se encontrarían en horas de la mañana de hoy, 26 de octubre 2018 con la Presidenta de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) Margarette Macaulay y miembros del Mecanismo Especial de Seguimiento para Nicaragua (MESENI), con el objetivo de discutir temas relacionados con la crisis humanitaria que vive el país desde el 18 de abril de 2018. La crisis ha merecido la atención de dicho  órgano del sistema interamericano de protección de los derechos humanos, como de CEJIL, organización internacional  que ha trabajado en Nicaragua desde hace muchos años.

Los hechos tuvieron lugar alrededor de las 7 am cuando las representantes del CEJIL: Marcia Aguiluz Soto, Francisca Estuardo Vidal y Paola Limón fueron notificadas por autoridades aeroportuarias que no podían ingresar al país alegando que no habían anunciado su ingreso con la anticipación requerida y luego, ante el cuestionamiento de la delegación, argumentando razones relacionadas con el ejercicio de la soberanía que son la expresión de un nuevo desmán hacia la labor de defensores y defensoras de derechos humanos.  Las autoridades se mostraron intransigentes aun cuando CEJIL contaba con una invitación formal por parte de la CIDH. En imágenes publicadas en la cuenta oficial de twitter de CEJIL se puede ver como su equipo es escoltado para abandonar el país acompañadas de un mensaje que denuncia: Así nos “escoltan” para salir de #Nicaragua, cuando intentamos ingresar a una reunión c/ l @cidh. Nos niegan ingreso pese a tener invitación formal. Echan mano de artilugios, y nos devuelven en menos de una hora #SosNicaragua”.

 En enérgico rechazo nos unimos a las voces que condenan vehementemente este acto como evidencia de la grave crisis humanitaria que vive el país centroamericano, así como la sistemática obstaculización de la labor de defensa de los derechos humanos.   Denunciamos la evidente intención del régimen de Ortega y Murillo por aislar a la comunidad internacional de la represión, hostigamiento y criminalización que continúa ejerciendo sobre un pueblo que continúa expresándose cívicamente; especialmente hacia los activistas, medios de comunicación independientes, defensores y defensoras de derechos humanos que se encuentran en completo estado de indefensión.  No en vano hace pocas semanas se dio a conocer la expulsión del grupo de trabajo de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas y hoy se niega arbitrariamente el ingreso de una de las organizaciones que históricamente ha trabajado por la democracia y la garantía de los derechos humanos. No ha mejorado nada en Nicaragua, como ha afirmado hoy OACNUDH en su primer boletín mensual de seguimiento de la situación.

Todos estos hechos nos motivan a elevar la alerta internacional respecto de la situación de Nicaragua, invitando a la comunidad internacional y a los  órganos de protección de los derechos humanos y distintas expresiones de sociedad civil a que redoblemos  esfuerzos para que la democracia, la justicia y la paz retornen muy pronto a Nicaragua.

Raza e Igualdad rechaza actos de acoso e intimidación contra periodista Sergio León director general de «La Costeñísima» de Nicaragua

Washington D.C. octubre 23 de 2018 – El Instituto Internacional sobre Raza, Igualdad y Derechos Humanos (Raza e Igualdad) rechaza y condena enérgicamente los actos de acoso, represión y hostigamiento contra el periodista Sergio León, Director General de la radio “La Costeñísima”, quien fue retenido arbitrariamente por la Policía, el pasado domingo 21 de octubre en Bluefields, ciudad ubicada en la Costa Caribe Sur de Nicaragua.

Los hechos tuvieron lugar mientras el periodista circulaba en su automóvil por las calles de Bluefields, después de ser informado sobre la numerosa presencia de policías y antimotines que se movilizaban por la ciudad fuertemente armados, situación que León decidió documentar por tratarse de una actividad inusual en la zona.

Mientras el periodista se disponía a hacer registro audiovisual y fotográfico de la  caravana de vehículos de la Policía que se encontraban en el sector de Colón en el barrio Fátima, los agentes del ultimo vehículo detuvieron su marcha, se bajaron de la unidad en posición de combate y violentamente abordaron al periodista, alegando que la actividad que realizaba no estaba permitida, argumentos que éste cuestionó expresando que no existía ninguna ley que prohibiera dicha actividad como periodista en su ejercicio profesional.

Acto seguido, los policías le solicitaron la documentación del automóvil y aún después de encontrar que todo estaba en orden, lo obligaron a bajarse de su auto y ser sometido a una inusual requisa; para después ser conducido a una delegación de policía donde fue retenido por más de una hora y multado sin argumento alguno, por la cantidad de 320 córdobas, lo que equivale aproximadamente a 10 dólares.

Adicionalmente, después de ser dejado en libertad, el director general de “La Costeñísima”, encontró que una de las llantas de su automóvil había sido hundida por un punzón y clavo de acero, en posición para que cuando el carro emprendiera su marcha se hundiera en la llanta, acto que también, según la denuncia realizada por el periodista, fue cometido contra su hija días atrás, con claro propósito de atentar contra su vida.

Todos estos hechos constituyen una clara violación a la libertad de circulación, expresión y labor informativa del periodista Sergio León, quien a inicios del mes de octubre participó del 169 periodo de Audiencias Públicas de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, denunciando la sistemática represión que el régimen de Ortega y Murillo ha emprendido contra la ciudadanía que ejerce su legítimo derecho de protestar, y contra  medios de comunicación y periodistas independientes que al informar denuncian al régimen por sus  actos contrarios a los derechos humanos y a las reglas más elementales de la convivencia pacífica.   Los y las periodistas, por su compromiso con la verdad y la justicia  se han visto sometidos a toda clase de actos de intimidación, persecución, hostigamiento y amenazas que atentan contra sus derechos fundamentales.

Raza e Igualdad exige al Estado nicaragüense cesar la persecución e intimidación contra los periodistas independientes y velar porque los derechos a la libertad de expresión, opinión y prensa sean garantizados.  Así mismo, demandamos implementar las recomendaciones realizadas por representantes de medios de comunicación y periodistas en la audiencia pública del período de sesiones 169 de la CIDH, antes mencionado, para garantizar la vida e integridad física de periodistas que hoy son acosados y censurados.  Hacemos un llamado a la comunidad internacional a documentar los actos de represión y censura a los que son sometidos diariamente las y los periodistas en Nicaragua, así como redoblar esfuerzos para que su llamado por la paz, la verdad y la justicia sea prontamente escuchado propiciando las condiciones necesarias para que Nicaragua retorne a la Democracia y garantice el indispensable respeto a los derechos humanos.

COMUNICADO PÚBLICO: Con represión y violencia el régimen de Ortega viola nuevamente el estado de derecho de Nicaragua

Una vez más el gobierno Ortega – Murillo reprimió al pueblo de Nicaragua que pacíficamente se disponía a participar el pasado 14 de octubre, en la marcha cívica “Unidos por la Libertad”, actividad en la que estarían participando activistas y defensores de derechos humanos para exigir paz, justicia y libertad para las y los presos políticos que hoy ascienden a más de 400.

Mientras activistas y reconocidos defensores y defensoras de derechos humanos protestaban pacíficamente exigiendo al régimen de Ortega libertad para las y los presos políticos, antimotines de la Policía fuertemente armados arremetieron violentamente contra las y los manifestantes, argumentando que la movilización se constituía como una actividad instigadora y provocadora, que obstruía el derecho a la tranquilidad y libertad de circulación de las familias nicaragüenses para realizar sus actividades cotidianas; esto según lo expuesto en comunicado oficial de la Policía, en el que se reportaron un total de 38 personas capturadas, de las cuales 8 fueron liberadas horas después. Entre los detenidos están líderes políticos y sociales como Suyen Barahona, Presidenta del Movimiento Renovador Sandinista, Ana Margarita Vijil dirigente Movimiento Renovador Sandinista y José Antonio Peraza, Director del Movimiento por Nicaragua.

El Instituto Internacional sobre Raza, Igualdad y Derechos humanos condena y rechaza enérgicamente la represión y brutalidad en la que incurrió la Policía el día de ayer en contra de activistas y defensores de derechos humanos; así como la censura y hostigamiento contra medios de comunicación nacionales independientes e internacionales que en ejercicio de su labor fueron retenidos.  Todos estos actos se constituyen como una gravísima violación a los legítimos derechos a la protesta social, libertad de expresión y de prensa; así como a la integridad, seguridad y buen trato que merecen las y los nicaragüenses según los tratados que conforman la Carta Internacional de Derechos Humanos y la Constitución nicaragüense.

Con preocupación denunciamos el patrón de crueldad y persecución del régimen de Ortega-Murillo, que se orienta a intimidar a la población para que desista de ejercer su legítimo derecho a manifestarse, lo que transgrede los derechos fundamentales de las y los nicaragüenses, así como el derecho internacional.  Las amenazas y actos de criminalización, intimidación y censura continúan escalando, lo que evidencia la poca voluntad política del gobierno nacional para tramitar una salida pacífica del conflicto y su afán por instalar de facto un estado de excepción.

Demandamos al gobierno de Nicaragua velar por la seguridad de su pueblo y cesar los actos de crueldad; así mismo, exigimos el respeto por ciudadanos y ciudadanas que cuentan con medidas cautelares otorgadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y se encuentran hoy detenidos.  Exigimos la libertad de todas y todos los presos políticos injustamente judicializados y de las personas detenidas ayer por ejercer su derecho a la manifestación. Demandamos información sobre su paradero y las condiciones en que se encuentran.

Finalmente, hacemos un llamado urgente a la comunidad internacional para redoblar esfuerzos que contribuyan a una solución pacífica a una crisis que ya ha cobrado más de trescientas vidas, más de dos mil personas heridas, centenares de presos políticos y personas desaparecidas.

Actos de violencia y represión en contextos de protesta fueron denunciados por periodistas y defensores sociales nicaragüenses ante la CIDH

Boulder, Colorado. 2 de Octubre de 2018.  Periodistas y defensores de derechos humanos participaron el pasado 2 de octubre en el 169º Período de Audiencias de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para denunciar la represión y violencia del gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo en contexto de las protestas sociales.

Desde el 18 de abril de 2018 Nicaragua se encuentra inmersa en una grave crisis de derechos humanos. Hasta la fecha la respuesta del gobierno de Daniel Ortega hacia quienes han ejercido su derecho a la protesta social, ha sido represiva y violenta. Esta situación se ha ido agravando hasta llegar al punto de oficializar la criminalización de las protestas por medio de un decreto policial emitido el pasado 28 de septiembre. Dicho decreto responsabiliza a la ciudadanía por supuestas agresiones y daños a la policía y a particulares, y además prohibe las manifestaciones públicas y amenaza con procesar judicialmente a quienes las convoquen y participen en ellas; lo que quiere decir, una política de terror para sumar a la desproporcionada cifra de presos políticos del gobierno nacional.

Durante la audiencia pública defensores de derechos humanos y periodistas describieron la evolución de la crisis en Nicaragua, que ha estado atravesada, como se ha mencionado en informes oficiales de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), por distintas etapas represivas  y niveles de intensidad que obedecen a prácticas violentas contra manifestantes, defensores y defensoras de derechos humanos, medios de comunicación y ciudadanía en general.  Adicionalmente, se expuso las graves violaciones a la libertad de expresión y libertad prensa, sometidas en el último tiempo a agresiones, intimidación, ataques, robos, persecución y censura.

Según el reporte ofrecido por Marco Carmona de la Comisión Permanente de Derechos Humanos de Nicaragua (CPDH) los grupos paramilitares y para-policiales continúan operando en el territorio en coordinación con la Policía Nacional, quienes además son responsables de más de 320 asesinatos en el país, dentro de los cuales se encuentran 5 niños, 27 adolescentes y 13 mujeres. En su discurso, Carmona advirtió que más de 3000 personas han resultado heridas y 1500 han sido detenidas arbitrariamente, de las cuales un 90% han sido torturadas con prácticas violentas como golpes, choques eléctricos, extracción de uñas, violencias sexuales, entre otras. “De las 603 personas que todavía continúan detenidas, sólo 203 han sido puestas a orden de un juez acusadas por delitos graves como terrorismo, portación y tenencia ilegal de armas y crimen organizado, a quienes también se le ha violado el derecho a un debido proceso” señaló el representante nicaragüense.

Por otra parte, Carmona indicó que las represalias contras las organizaciones no cesan, por lo que promotores, que incluso gozan de medidas cautelares, se han visto obligados a salir del país por amenazas de muerte recibidas, lo que confirma un estado de indefensión del pueblo y un recrudecimiento de la violencia por los llamados a “mantener el orden público” quienes por orden del jefe de estado están arremetiendo contra quienes tan sólo portan banderas o globos azules y blancos, colores insignia de la bandera nicaragüense.

En su intervención, Patricia Orozco, representante de la radio independiente Onda Local, señaló que ejercer la libertad de expresión y de prensa, legítimo derecho de los periodistas, es un delito para el régimen de Ortega por el hecho de no estar alienados con las políticas dictatoriales de su gobierno. “Los medios de comunicación independientes no escapamos a la política de terror del gobierno. Menos aún las radioemisoras locales, quienes enfrentan el asedio frontal de fuerzas policiales, y paramilitares, por informar lo que sucede” testificó la periodista.

En relación a lo planteado, Joel Hernández, comisionado encargado de la Relatoría sobre los Derechos de las Personas Privadas de Libertad lamentó la ausencia del estado nicaragüense, y su falta de voluntad política para tramitar un diálogo y  la crisis hoy latente en el país.  Además planteó con mucha preocupación que el asedio hacía medios de comunicación y/o periodistas independientes puede constituirse como una cuarta etapa de represión del gobierno de turno, después de las ya denunciadas por la misma Comisión en relación al asesinato, intimidación, señalamiento y amenazas por parte del régimen.

En adición, el Comisionado Hernández, declaró que producto de la visita recientemente realizada al país, de la cuál no recibió respuesta del gobierno nacional, pudo identificar un patrón regular, hallado en los testimonios de diferentes representantes de organizaciones de sociedad civil.  Este patrón está relacionado con los procesos penales, condiciones de internación y centros penitenciarios que enfrentan los presos políticos del régimen. El Comisionado advirtió, que el poder judicial debe ejercer un mayor escrutinio a las acusaciones formuladas por terrorismo, sobre todo cuando un elemento de tipo penal, el relativo a la “alteración del orden constitucional”, es sumamente subjetivo y no forma parte de la práctica internacional para la represión del terrorismo; acusación utilizada frecuentemente como argumento de enjuiciamientos y sentencia hacía los presos políticos.

En este sentido, Paulo Abrão, Secretario General de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), planteó con preocupación que se está avizorando en el país una situación muy grave relacionada con la normalización o normatización del conjunto de excepciones a las reglas del estado de derecho.  Según lo planteado por el representante, es necesario estar muy pendientes, pues todo parece apuntar a una intención de transformación de un estado de derecho a un estado de excepción. Así mismo, Abrão señaló que la forma de resolver  la normalización de la excepción, sería respetando la independencia judicial, a través de las denuncias de los jueces por las injerencias y abusos de poder por parte de la policía al no permitir detenciones arbitrarias, lo que a la fecha no está sucediendo.

Sergio León, director de la «La Costenísima» se declaró víctima de constantes amenazas por su labor, alegando que ser periodista hoy representa un gran peligro en el país, especialmente en el Caribe, zona donde fue asesinado el periodista Ángel Gahona, delito por el cual fueron procesados y condenados dos jóvenes afrodescendientes bajo un proceso judicial inconsistente.  En este sentido, Edison Lanza Relator  Especial para la Libertad de Expresión señaló: “La persecución se intensifica pues hay una intención del estado de falsear la realidad a través de una narrativa que no corresponda al contexto nacional para así encubrir un ejercicio de terror”

La Comisionada y Relatora para el Estado de Nicaragua de la Comisión IDH, Antonia Urrejola, hizo un llamado urgente al gobierno de Nicaragua a no tomar represalias contra las personas partícipes en la audiencia, por lo que instó velar por su protección.

Representantes de la sociedad civil presentes en la audiencia pública solicitaron ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que se continúe pronunciando públicamente sobre la grave situación de vulnerabilidad en la que se encuentran los periodistas y defensores de derechos humanos en el país. Además, pidieron que la CIDH inste al gobierno a cesar de inmediato la represión contra el pueblo desarmado y a que revoque el comunicado policial que pretende servir de fundamento para criminalizar la protesta social.  Así mismo, se solicitó instar al gobierno cesar el acoso, intimidación, ataques físicos y la censura a periodistas y medios de comunicación locales y nacionales.  Por otra parte,  se solicitó  al Estado de Nicaragua la libertad inmediata de todos los presos políticos, otorgar oportunamente las medidas cautelares que evidencian el entorno de riesgo en el que se encuentran periodistas y defensores de derechos humanos y finalmente, que la Comisión coordine con el gobierno un protocolo para la implementación efectiva de las medidas cautelares.

Vea audiencia completa aquí:  https://www.youtube.com/watch?v=XECN6lLBEUU&t=2063s 

Aníbal Toruño – Radio Darío «La dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo tiene sus días contados»

«La resistencia. Lo único que podemos hacer en este momento es resistir, resistir y resistir, pacíficamente resistir» Aníbal Toruño – Radio Darío

 

La situación de violencia y represión que se vive en Nicaragua es cada vez más errática, tras la expulsión del grupo de trabajo de la Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (OACDH) y los múltiples llamados de los países miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA) nuevas formas de represión se perpetúan en el territorio, incluso, a pesar de los esfuerzos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) con su Mecanismo Especial de Seguimiento para Nicaragua (MESENI) y su Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) quienes de cerca han logrado ver la barbarie de los actos represivos que hoy atentan contra la vida, integridad y respeto de los derechos humanos de la población nicaragüense; además de la poca disposición al diálogo y casi nula voluntad política del gobierno de turno.

Pese a los innumerables llamados de las y los nicaragüenses y de la comunidad internacional que convocan al gobierno nacional a cesar la represión, criminalización y hostigamiento hacía la población que se manifiesta pacíficamente para poner fin a la guerra que se vive ya hace casi 6 meses y que ha dejado un saldo de más de 450 muertos, 2000 heridos y 355 presos políticos, según las cifras ofrecidas por organizaciones de derechos humanos del país, el pasado viernes 28 de septiembre, la policía nacional, publicó un comunicado en el que califica como «ilegales» las protestas del pueblo contra las políticas de Daniel Ortega y advierte a organizadores de dichas manifestaciones que «responderán ante la justicia» por promover concentraciones y movilizaciones públicas ilegales, que alteran el orden público, promuevan acciones ofensivas y delictivas que atentan contra el trabajo y la vida de las familias nicaragüenses.

La posibilidad de retornar a un diálogo nacional, la concertación y el cese de la violencia, no se ven muy claros en el panorama, el gobierno nicaragüense liderado por Daniel Ortega y Rosario Murillo carece de voluntad política y un diálogo nacional que posibilite la construcción de una paz estable y duradera en el país; por el contrario, Ortega y Murillo han recurrido, a varias estrategias represivas, como lo han sido la llamada «Operación Limpieza» en la que grupos policiales, parapoliciales y civiles afines al gobierno con armas de gran calibre arremetieron contra los barricadas construidas por la sociedad civil para defenderse de los ataques de grupos armados del orteguismo; además de la toma de tierras, estrategia utilizada como represalia hacía sector privado que ahora se opone al gobierno; la violencia contra representantes de la Iglesia Católica actores claves de mediación para lograr la justicia y democratización del país, y recientemente, las detenciones arbitrarias que deja una cifra alarmante de presos políticos que se encuentran en las principales cárceles del país bajo tortura y deplorables condiciones de higiene y atención médica. Todas estas acciones represivas para volver al denominado «orden nacional» lo único que han ocasionado es una agudización del conflicto y, por tanto, violaciones a la libertad de expresión del pueblo, criminalización a la protesta social y un temor que se extiendo en toda Nicaragua.

Mientras tanto, la sensación generalizada, de la comunidad internacional, y de la sociedad civil, organizaciones de estados y organizaciones no gubernamentales gira en torno a preguntas como: ¿Qué más tiene que pasar? o en definitiva ¿Qué debería pasar para que la paz retorne a la República de Nicaragua? ¿Qué hacer para cesar las muertes y detenciones arbitrarias? Ciertamente la respuesta de Ortega y Murillo hasta la fecha ha sido desalentadora e indignante, justamente porque las muertes que se han dado en el contexto de la represión siguen impunes, y la responsabilidad continúa siendo conferida a «fuerzas extranjeras» que valiéndose de elementos internos en el territorio quieren acabar con la paz del país y su soberanía; excusas bastantes comunes que ofrecen otros regímenes dictatoriales, pero que no responden al clamor de justicia de las familias, de tantos jóvenes, niños y niñas y civiles asesinados como resultado de la represión por parte del régimen de Ortega y Murillo que no han querido aceptar atender las causas estructurales que motivaron las protestas los últimos meses en Nicaragua.

Consternados por el desenlace de este mal capítulo en la historia de Nicaragua, el Instituto sobre Raza, Igualdad y Derechos Humanos conversó con Anibal Toruño, director de Radio Darío, quien ha sido víctima directa de agresión, hostigamiento y amenazas por parte de los simpatizantes y promotores de esta escalada de violencia y quien hoy cuenta con medidas cautelares otorgadas por la CIDH. En su análisis Aníbal logra identificar una clara estrategia de guerra por parte de Daniel Ortega, estrategia de exterminio utilizada para ganar tiempo y así poder configurar mejores condiciones de negociación para salir del poder.

¿Cómo describe usted la actitud que el gobierno nacional ha asumido frente a toda la ola de violencia que vive su país?

Daniel Ortega está acostumbrado a llevar las cosas al margen del abismo, cuando salió en su discurso y dijo que no iba a adelantar elecciones básicamente estaba apostando a llevar las cosas al margen del abismo, para eso tuvo que haber matado en Jinotepe y en Diriamba más de 30 personas adicionales, más de 100 heridos, para eso tuvo que haber avasallado a los Obispos al Cardenal y a el Nuncio, Ortega negocia con hierro, él es un tipo oscuro, maquiavélico, que quiere llegar en algún momento a negociar su transición de poder, porque él sabe que ya no podrá volver a las lógicas de manipulación que utilizaba antes del 18 de Abril, por eso su transición, la quiere negociar en unos términos que sean más cerca de lo que él quiere y más lejos que de lo que nosotros deseamos.

¿Cómo cree que Daniel Ortega está intentando negociar esto que usted denomina «transición de poder»?

Daniel sabe que no hay posibilidad de volver al poder, él sabe que sus días ahí están contados, no hay vuelta atrás, lo que él está haciendo es utilizar una horrible estrategia de muerte, sangre y dolor para tener una mejor posición y así poder negociar tres cosas: 1. Su impunidad; 2: Cuotas de poder y, finalmente 3: La protección de sus intereses económicos dentro de Nicaragua. El lapso de tiempo en el que él jugó un poco con el diálogo lo utilizó para armar ese ejército de muerte que hoy actúa impunemente y desgobierna, porque hoy mandan las camionetas de la muerte con los paramilitares, para-policía y turbas del miedo.»

¿Cuál cree que es el panorama nacional e internacional con el que está jugando Daniel Ortega? ¿Cómo lo describiría?

El regreso al pasado, sabe que no lo tiene, sabe que no va a tener financiamiento del Fondo Monetario Internacional, ni del Banco Mundial, ni del BID, como tampoco financiamiento de la Unión Europea, de ningún organismo internacional, por tanto, la economía va a «pique» total y complemente, la economía en mi país está básicamente paralizada; la ley Global Magnitsky está jugando en su contra, ésta ya empezó a afectar a su círculo más interno, entre ellos Francisco López y Fidel Moreno, que como ya lo vimos fueron sancionados por la ley, esta es la estrategia que Estados Unidos está utilizando para presionar al gobierno nacional.

Por su parte, la Organización de Estados Americanos (OEA) le ha puesto una salida única la cual son elecciones adelantadas, no sé, pero a mí me da la sensación de que hay un entorno, una especie de tijera de los países democráticos del mundo, como para poderlo presionar para que entre en una negociación final, y él ha decidido que para entrar en esa negociación final tiene que fortalecer sus posiciones y decidió que a través de la violencia, el miedo, como lo que hoy estamos viviendo con la detención de más de 300 nicaragüenses sentenciados a puerta cerrada, y las formas de hacer «limpieza» como lo hizo con las barricadas, eso supuestamente, según mi análisis, le va a dar una mejor posición de negociación.

¿Según el análisis de contexto que hace anteriormente qué cree que puede pasar en Nicaragua?

Yo quiero reiterar que Daniel Ortega se va porque se va del poder; lo que habría que ver es en el desarrollo de los acontecimientos, qué tanto se puede hacer en la negociación para que sea de frente al pueblo o de la nación, y así ver si podemos hacer un proceso que nos lleve finalmente a alcanzar elecciones libres y transparentes en Nicaragua. Yo no veo una revolución armada que venga a tratar de derrocar a Daniel ortega porque aquí no hay armas, aquí lo que hay es una resistencia cívica, social contra Daniel Ortega y eso hasta cierto punto es un proceso bien complejo, bien complejo porque Daniel Ortega tiene todo el aparato militar y la infraestructura la fuerza, y desde luego nosotros estamos poniendo los muertos, es indudable, sería un error, armar o pensar que se resolvería armando a la resistencia, eso es un error, debe mantenerse en un sistema de resistencia social, pacífica, utilizando los recursos de herramientas y defensas que se nos permita dentro de ese marco, y seguir adelante y es una lucha de desgaste… así como se le termina el tiempo a Daniel Ortega se nos termina a nosotros, estamos claros en eso.

Pero estratégicamente yo lo veo en tres tomos, tres perspectivas. Un primer tomo, que me duele mucho de admitir, es con mi pueblo resistiendo, pacíficamente, una estrategia de guerra, sangre y muerte de Daniel Ortega que lucha a través de la violencia, la muerte y la represión por tener un mejor escenario para el poder negociar mejor sus condiciones; para después en un segundo tomo o momento, llegar a elecciones adelantadas transparentes, refundando el estado, separación de poderes; y finalmente o tercer tomo, tendría que ser aterrizar esta primera y segunda parte, para que de manera pragmática y efectiva se logre alcanzar la justicia respecto de los asesinatos, del genocidio, de la corrupción; entonces sería ver como desde ese nuevo gobierno confrontar ante la justicia nacional e internacional los responsables materiales e intelectuales de estos actos atroces de muerte.

¿Qué papel jugaría la comunidad internacional en todo este proceso de negociación?

Ortega ya ha hecho lo necesario para sacar a los grupos de trabajo de la Unión Europea y aunque no ha sacado a la Comisión Interamerican de Derechos Humanos, no los deja hacer mucho, ha cerrado mucho las puertas, sin embargo, el papel que considero debe jugar la comunidad internacional es seguir acompañando a una población que está en completo estado de desprotección, además de seguir ejerciendo presión al gobierno, documentando, exponiendo en todas las tarimas internacionales las atrocidades que están pasando en Nicaragua y finalmente poder dar seguimiento al proceso de refundación del estado y penalización para los responsables.

No veo viable, por la manera como están diseñados los organismos internacionales hasta este momento, la presencia de un ejército o brazo armado internacional que instigue al Estado a parar; lo único que veo es que, presionado por un mundo democrático, Daniel Ortega ceda al diálogo; esa es su única salida y nuestra única salida.

¿Cuáles son las alternativas entonces que tiene el pueblo nicaragüense en este momento?

La resistencia. Lo único que podemos hacer en este momento es resistir, resistir y resistir, pacíficamente resistir – Daniel Ortega escogió la violencia, la muerte, y la represión para tener una posición más fortalecida para poder regresar al diálogo con más fortaleza y poder negociar su impunidad, su cuota de poder y los temas económicos. Creo que también hay que recurrir a la perseverancia de los organismos internacionales del mundo democrático, bloqueo económico total y completo para Nicaragua donde no exista financiamiento alguno, aplicación de la Ley Magnitsky en toda su extensión para los corruptos y para aquellos que han matado a tantos nicaragüenses y finalmente una mesa de diálogo efectiva y verdaderamente democrática.

Lo deseoso y lo deseado es que Daniel Ortega se vaya de Nicaragua de una vez y para siempre, eso lo deseamos todos, veremos a ver si en el proceso y el pragmatismo, entre lo que podemos, entre nuestro sentimiento, y la realidad podemos hacerlo, pero indudablemente la solicitud de un mundo democrático, de sociedad democrática internacional que presione que bloquee, que hagan todo lo que esté humanamente al alcance para que nosotros podamos alcanzar un punto en el que Daniel Ortega acepte salir democráticamente de este país, el regreso a ese pasado que él construyó a fuerza de un régimen totalitario no va a volver a suceder en Nicaragua

Raza e Igualdad participa del 169º Período de Audiencias Públicas de la CIDH de la mano de organizaciones de Colombia, Cuba y Nicaragua

En compañía de más de 20 organizaciones el Instituto Internacional sobre Raza, igualdad y Derechos Humanos participará del 1 al 5 de octubre del “169º período de sesiones de Audiencias Públicas” realizadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en la Universidad de Colorado ubicada en la ciudad de Boulder, Estados Unidos.

Para este período de sesiones, Raza e Igualdad participará de tres (3) audiencias públicas solicitadas por organizaciones de Colombia, Cuba y Nicaragua, con el fin de exponer ante relatores de la Comisión IDH y la comunidad internacional las situaciones de derechos humanos que enfrentan cada uno de estos países.  Para el caso de Cuba y Nicaragua las audiencias están orientadas a exponer los casos de criminalización y represión hacía activistas, periodistas, defensores y defensoras de derechos humanos por parte de los gobiernos nacionales de sus países en medio de la crisis política desatada hasta la fecha; y en el caso de Colombia la audiencia está orientada a describir y denunciar la situación de derechos humanos del pueblo afrocolombiano.

La Comisión Interamericana realiza varios períodos de sesiones al año, oportunidades en que coinciden cientos de defensores y defensoras de derechos humanos de la región, así como delegaciones de los Estados constituidas por altas autoridades en materia de derechos humanos, académicos, entre otros.  De acuerdo con lo establecido en el Artículo 68 del Reglamento de la CIDH, las audiencias son públicas y los interesados pueden asistir libremente, sin necesidad de registro previo.  Las audiencias son transmitidas en línea en varios idiomas a través de la página oficial de la CIDH.

A continuación presentamos el cronograma de audiencias públicas de Colombia, Cuba y Nicaragua en las que Raza e Igualdad acompañará.

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