La Resolución aprobada de manera unánime, en el Congreso Nacional de Estados Unidos condena la represión del Gobierno Nicaragüense
Agosto 14 de 2018 – El pasado 25 de Julio, la Cámara de Representantes del Congreso de los Estados Unidos aprobó de manera unánime la resolución bipartidista H.Res.981, propuesta por […]
Agosto 14 de 2018 – El pasado 25 de Julio, la Cámara de Representantes del Congreso de los Estados Unidos aprobó de manera unánime la resolución bipartidista H.Res.981, propuesta por la Congresista Republicana Ileana Ros-Lehtinen, representante del Distrito 27 del Estado de la Florida, y copatrocinada por el Congresista Republicano Ed Royce, Representante del Distrito 39 del Estado de California y presidente del Comité de Relaciones Exteriores, el Congresista Demócrata Albio Sires, Representante del Distrito 8 de Nueva Jersey y miembro de mayor rango en el Subcomité del Hemisferio Occidental, y otros miembros del Congreso. La resolución condena la violencia y represión perpetrada por el Gobierno de Daniel Ortega a su pueblo durante los últimos tres meses, que a la fecha ha provocado la muerte de 295 personas, según la última actualización la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Durante su declaración, la cual fue publicada en un comunicado de prensa después de ser aprobada la resolución, la Congresista Ros-Lehtinen condenó en nombre de todos los proponentes de la resolución la persecución, intimidación, violencia y asesinatos cometidos por el gobierno de Nicaragua contra sus ciudadanos; indicando que el número de muertos aumenta todos los días bajo una política de “disparar a matar”. Además, resaltó que a la cifra de homicidios se suman los heridos, arrestos arbitrarios y desapariciones forzadas, medidas que según la Congresista son acciones represivas tomadas por un régimen que hará lo necesario por mantenerse en el poder. La Representante señaló la importancia de ejercer presión sobre Daniel Ortega y su régimen; instando al gobierno Americano a hacer más teniendo en cuenta que el tiempo es supremamente importante para proceder: “Mi resolución insta a la administración a hacer más, a identificar más ‘matones’ de Ortega para ser sancionados y para esto el tiempo es esencial” señaló la representante de estado.
La resolución aprobada, entre otras medidas, identifica de forma contundente a Ortega como el orquestador de la violencia e insta a la Administración a tomar más medidas contra el régimen; por otra parte, demuestra apoyo inquebrantable al pueblo de Nicaragua en su búsqueda de la democracia, incluido el llamado a elecciones anticipadas, libres y justas supervisadas por observadores nacionales e internacionales creíbles. Además, convoca a las naciones para que se solidaricen con el pueblo de Nicaragua.
El mensaje enviado por el congreso americano al gobierno nicaragüense es el clamor de no sólo este país, sino de muchos otros, de organizaciones de sociedad civil y sociedad en general, para que cese la violencia en Nicaragua. Es preocupante, que a pesar de ese clamor, la represión en el país continúe, muestra de ello es la grave situación de violación al legítimo derecho al debido proceso que enfrentan en que se encuentran los líderes campesinos Medardo Mairena y Pedro Mena acusados sin presencia de su familia ni abogados de su elección por terrorismo, crimen organizado, asesinato, secuestro simple, robo agravado, entorpecimiento de servicios público y daños y perjuicios a 23 supuestas víctimas, entre las que incluyen al Estado de Nicaragua. En días pasados, medios de comunicación locales notificaron que los dos líderes sociales estaban siendo torturados por parte de la Polícia Nacional, situación que el Instituto sobre Raza, Igualdad y Derechos Humanos (Raza e Igualdad) condena enérgicamente y solicita la intervención de la comunidad internacional para velar por los derechos de estos líderes del movimiento campesino que se enfrentan a una maquinaria judicial viciada, instrumentalizada por Daniel Ortega.
La resolución pide a la administración estadounidense que continúe condenando las atrocidades en Nicaragua, que exija la liberación de ciudadanos detenidos injustamente e identifique a personas cuya participación en la violencia les hace merecedores de sanciones previstas en la Ley Global Magnitsky, la cual impone sanciones a violadores de derechos humanos, y congela sus bienes y activos Estadounidenses. La resolución del Congreso ve en elecciones libres, anticipadas, la solución a la grave crisis de derechos humanos que enfrenta Nicaragua desde abril.
Raza e Igualdad considera que iniciativas como la del Congreso estadounidense y otras que ha adoptado la comunidad internacional son expresiones de solidaridad hacia el pueblo nicaragüense y que como tales, contribuyen a la resolución del conflicto sin que haya más derramamiento de sangre de un pueblo dispuesto a recuperar su libertad.